jueves, 15 de abril de 2010

de vinos



He de reconocer mi debilidad por los vinos de los arribes.
De niño me crie entre sus viñedos, conocí la riqueza de la gastronomía una tarde en el Bodegón de Anibal donde probé por primera vez el vino acompañado de un tomate con sal,soberbio; y sobre todo compartí horas con Paquito de la peña en su bodega pionera en Fermoselle.

Me impresionó estos días en el salón, el vino Condado de Fermosel de Benigno Garrido de Ocellum Duri, una correcta y equilibrada combinación de Rufete, Juan Garcia y Tempranillo.